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lunes, 4 de mayo de 2015

Proyecto de Vida en el Adulto Mayor

El proyecto de vida es una capacidad que poseemos los seres humanos para vernos a nosotros mismos como nos gustaría ser en un futuro, con fin de dar sentido a la vida. 

Se tiene un concepto equivocado de que la persona cuando entra a una edad avanzada, no puede realizar las actividades que siempre le gustaron. Sin embargo, el adulto mayor también puede tener un nuevo plan estratégico personal de vida el cual le permita cumplir nuevas metas tanto personales como profesionales. 



Así como en la juventud nos empeñamos en formar una familia, obtener un título, un empleo, así como más tarde en nuestra edad adulta nos obsesionó quizá el tener un auto, una casa, los cuales aseguramos por aquello de los accidentes, así como tal vez aseguramos nuestras vidas para un consuelo económico de la familia, así debemos planear nuestras acciones del futuro. Debemos rescatar aquellos sueños, aquellos ideales que tal vez estén llenos de polvo y telarañas en el rincón más obscuro del baúl de los recuerdos, puede ser que la polilla del desencanto los haya carcomido, ¡si, puede ser!, sácalos al sol, ventílalos, analiza cada uno de tus proyectos de la adolescencia, de tu juventud, de tu edad adulta.

Si bien, la mujer y el hombre mayores se encuentran jubilados de su actividad laboral, han sido y son personas muy activas, y en muchas ocasiones desarrollan numerosas actividades en su comunidad o centros de trabajo de procedencia, entre otras tareas; en fin, han sido los protagonistas y hacedores de nuestra sociedad, les interesa continuar en grupos sociales de personas de su misma edad o coetáneos, así como en actividades sociales útiles. Como cualquier etapa de la vida, tiene diversos intereses. El proyecto de vida es, en gran medida, el fruto de la experiencia anterior de la persona, volcada en la actualidad y el devenir. Por eso, los proyectos de vida serán legítimos y efectivos si en ellos se revelan las propias potencialidades del individuo, si estas vinculan y dan continuidad a lo que fue, lo que realmente es, y las posibilidades de lo que llegará a ser.

La capacidad de tomar decisiones y ejecutar acciones por sí mismo(a); adoptar estas determinaciones sin vacilar y llevarlas a cabo con constancia, así como ser capaz de dominar su propia conducta (vencer obstáculos internos), resultan imprescindibles para enfrentar con éxito las dificultades externa, puesto que son componentes importantes de la voluntad, que participan en la regulación de la actividad. Si a ello se suma el hecho de tenerse confianza y respetarse, de sentirse competente para vivir y merecer la felicidad, entonces puede decirse que se cuenta con una poderosa fuerza al servicio de la vida.

Aún es tiempo de buscar las estrategias necesarias para que los realices, no le hagas caso a la frustración, ¡es pésima consejera!, no la escuches sólo te querrá detener en esta gran decisión que ya has tomado.

Ahora que ya conoces qué es un proyecto de vida y porqué es tan importante, ¿qué esperas? Coge lápiz y papel y empieza a esquematizar todos tus objetivos a corto y largo plazo. Trabaja en ello e involucra a tu familia y amigos en ello para que te motiven y apoyen en este gran proceso.

Y tú...

¿Cómo estás disfrutando de tu vida hoy? 
¿Cómo quieres vivirla en un futuro?